La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado una fianza de responsabilidad civil de 169.000 euros para Maria Luisa Durán, ex jefa de prensa de Aina Castillo, ex consellera de Sanidad y Consumo de Baleares bajo el último mandato de Jaume Matas, después de haber sido interrogada en calidad de imputada en el marco de la causa que investiga la presunta financiación ilegal del PP balear y el supuesto amaño de contratos en favor de Over Marketing.
Durante su comparecencia, Durán ha sido interrogada en torno a las tareas que llevó a cabo para Over cuando a ésta le fue adjudicada por el Govern la campaña de comunicación del Hospital de referencia de Baleares mientras estaba contratada por la Conselleria, según han informado fuentes jurídicas.
Mientras tanto, el fiscal Pedro Horrach ha expuesto su intención de solicitar también fianza civil para la ex directora general de Tecnología y Comunicación Encarnación Padilla, cuñada de Matas, si bien se trata de una petición que aún no ha sido concretada formalmente ante el juez instructor del caso Over Marketing, José Castro.
En su declaración, Durán ha justificado, sobre su contratación en Over, que accedió a esta empresa cuando ya no trabajaba para la Conselleria. Según ha explicado, cuando estaba en este departamento del Gobierno solicitó una excedencia durante la cual estuvo buscando trabajo, y fue en ese momento cuando el dueño de Over, Daniel Mercado, se puso en contacto con ella para si ver si quería prestar sus servicios para esta empresa publicitaria.
Mercado, por su parte, aseveró que primero Matas y luego Castillo le comunicaron que Over iba a trabajar para la Conselleria, pero para ello tenía que contratar a Durán por un importe de 6.000 euros mensuales para que coordinara la campaña de publicidad de Son Espases, todo ello mientras desarrollaba sus funciones en la Conselleria.
Según dijo, "me vi obligado a acatar esta imposición". Tal y como precisó, se trataba en realidad de un importe global que ascendió a unos 34.000 euros y que "acabó pagando el contribuyente" al ser facturado a la UTE constructora de Son Espases, a pesar de que "apenas aparecía por las oficinas de Over".