El periodista Eladio Jareño, ex responsable de comunicación de Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del Partido Popular en Cataluña, será nombrado nuevo director de TVE, en sustitución de José Ramón Diez. Se trata de un profesional que cuenta con una dilatada trayectoria en la televisión pública.

Jareño ha sido propuesto para el cargo por el presidente de Radio Televisión Española, José Antonio Sánchez y, teniendo en cuenta que los consejeros nombrados a propuesta del Partido Popular son mayoría en el Consejo de Administración del ente público, todo hace pensar que la votación que se llevará a cabo próximamente en el máximo órgano de gestión de la corporación será favorable a Jareño, quien actualmente y desde noviembre de 2014 está al frente del centro territorial de RTVE en Cataluña.

Jareño es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona e inició su carrera profesional como responsable de Seguridad de los Juegos Olímpicos de 1992. Ha sido asesor de prensa del gobernador civil de la ciudad condal (1992-1996), profesor del Instituto Nacional de Administración Pública (1991-2000), director de comunicación de la Delegación de Gobierno en Cataluña (1996-2002), director de Gabinete de esa misma Delegación del Gobierno en Cataluña (2002-2003) y director de TVE en Cataluña y delegado territorial de RTVE en Cataluña entre 2003 y 2004.

En esa etapa, Jareño auspició la creación del programa infantil Los Lunnis, uno de sus logros más celebrados en la televisión. Al mando de Cataluña le había puesto precisamente José Antonio Sánchez, que fue director general de RTVE entre 2002 y 2004.

Recién regresado a RTVE procedente de Telemadrid, Sánchez volvió a confiar en Jareño para uno de sus primeros nombramientos, nada más asumir la Presidencia de la corporación, a finales de 2014, cuando pasó a liderar de nuevo el centro de Sant Cugat del Vallès, el más importante de RTVE tras las instalaciones de Madrid.

Una vez dimitido José Ramón Díez como director de TVE, Sánchez ha vuelto a recurrir a uno de sus hombres de confianza dentro de la casa.