Cuando cambia el partido en el poder, toca revolución en la televisión pública, y directivos y periodistas son cambiados por el Gobierno de turno. Pero hay un rostro que permanece en su silla de TVE desde hace nada menos que 21 años y al que ni el PP ni PSOE la han tocado en todo este tiempo. Se trata de Ana Blanco, que presenta el Telediario 1 de lunes a viernes desde 1991.
En un cambio de Gobierno, una de las primeras víctimas suele ser el director de informativos de TVE. Pero también suele implicar cambios de presentadores. Un claro ejemplo es lo que ha sucedido en los últimos dos meses, en el que el equipo de editores y presentadores de telediarios ha cambiado por completo.
Desde la llegada de Julio Somoano como director de informativos, los cambios han sido sonados, tanto en la radio con las salidas de Juan Ramón Lucas o Toni Garrido, como en la televisión, con la marcha de Ana Pastor o los cambios de sitio como María Casado.
Sin embargo, ajena a estas revoluciones, Ana Blanco lleva las dos últimas décadas al frente del Telediario de las 15.00 horas, ya estuviera el PP o el PSOE en el poder, convirtiéndose en un emblema de credibilidad, una de las señas de identidad de la casa.
Su presencia no sólo se limita al informativo, también ha estado al frente de programas especiales con motivo de elecciones generales, los atentados del 11-S en EEUU o los del 11 de marzo en Madrid. Ha recibido en varias ocaciones el Premio TP y el de la Academia de la Televisión al mejor presentador de informativos.
"He tenido la suerte de no tener que pelear mucho por no ser sólo un imagen, porque desde un principio, cuando comencé en TVE, en plena Guerra del Golfo, hice labores que me ayudaron a que me considerasen como periodista, no sólo como presentadora", explicó Blanco con motivo de su vigésimo cumpleaños al frente del Telediario 1.
Ahora que está tan candente el tema de la instrumentalización de los medios públicos, Blanco responde con rotundidad sobre el hecho de haber recibido en algún momento consignas políticas: "No me han llegado ese tipo de presiones, aunque en todo este tiempo hay gente con la que te entiendes mejor o peor, y no todas las etapas han sido iguales".