Fernando Moraleda destaca la importancia de gestionar la vanidad para ser un buen portavoz del Gobierno

Fernando Moraleda destaca la importancia de gestionar la vanidad para ser un buen portavoz del Gobierno
Fernando Moraleda, ex-secretario de Estado de Comunicación del Gobierno de España destacó, durante el último Encuentro Forocompol que protagonizó el pasado 26 de Mayo, la importancia de gestionar la vanidad para ser un buen portavoz del Gobierno.

En el transcurso de este encuentro-coloquio, aseguró que la comunicación política necesita un buen sistema que garantice que se minimizan errores. "Lo relevante es lo negativo, por eso es una comunicación de riesgos", añadió.

Además, subrayó la importancia de que el responsable político se crea lo que dice. "El silencio es un arma difícil de gestionar, pero es un elemento vertebrador de la comunicación. Cuando no quieres decir algo no lo debes decir", explicó.

Moraleda analizó los diferentes instrumentos de la comunicación política que él mismo utilizó durante su etapa como secretario de Estado de Comunicación, y destacó la importancia del "principio de lealtad" que en su opinión deben los portavoces a sus presidentes. Asimismo, puso en valor los protocolos exhaustivos de crisis para enfrentarse a situaciones desfavorables. "En estos casos es fundamental la jerarquía y que sólo haya un portavoz", aseguró.

Por último, aseveró, en relación a las nuevas tecnologías y su uso en comunicación política, que las redes sociales "tienen mucha importancia por segmento de edad". "Es fundamental la imagen y el titular, ya que los jóvenes no reposan tanto la información", sentenció.

Fernando Moraleda Quílez estudió Ciencias Químicas en el Colegio Universitario de Ciudad Real, su ciudad natal, y en la Universidad Complutense de Madrid.

Fue miembro del Gabinete Técnico de la Federación de Trabajadores de la Tierra y del Gabinete Técnico de la Unión General de Trabajadores, antes de ser nombrado en 1987 Secretario General de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), siendo reelegido en cinco congresos consecutivos.

En el año 2000 fue miembro del Comité Económico y Social Europeo, puesto en el que fue reelegido en 2002. En abril de 2004, al comenzar la VIII Legislatura, fue nombrado secretario general de Agricultura y Alimentación, donde permaneció hasta septiembre de 2005, cuando fue nombrado secretario de Estado de Comunicación, cargo que ocupó hasta abril de 2008.

Actualmente es diputado del Partido Socialista Obrero Español por la provincia de Ciudad Real.

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