Politólogos, consultores y académicos han coincidido en que a cinco años de su puesta en marcha, el actual modelo de comunicación político-electoral mexicano ha funcionado, aunque han destacado que no se debe descuidar el elevado número de spots y la publicidad encubierta en las contiendas electorales del país.

Durante el seminario titulado Balance y Perspectivas de reforma del Modelo de Comunicación Político-Electoral, los participantes reconocieron que en el actual modelo mexicano, las pautas de radio y televisión han tenido un cumplimiento de más de 95 %.

El ex consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Luis Carlos Ugalde, discutió con los ponentes sobre la funcionalidad del actual modelo de comunicación, y recordó que ésta debe verse por el cumplimiento de sus metas y no por sus indicadores de gestión. Se ha vuelto “una práctica creciente y común hacer pagos en efectivo para la cobertura de campañas y esto no solamente incluye a los medios electrónicos sino también a muchos medios impresos y se ha convertido en un costo muy importante”, expuso.

Según Ugalde Ramírez, los propios partidos y candidatos comentan que el pago de cobertura mediática, junto a los recursos líquidos que requieren para estrategias de movilización de votantes, “son probablemente los dos elementos que explican el encarecimiento de las campañas en los últimos años”; de tal forma que de manera directa o indirecta, hoy las campañas son más caras en términos generales, aunque si bien la financiación para partidos ha disminuido para las campañas, abundó.

“Este modelo de comunicación, aunque no se pagan spots, no ha contribuido a reducir el costo que se paga para obtener cobertura mediática. Un resultado inesperado, un resultado indeseable pero está ocurriendo”, enfatizó el director general de Integralia Consultores.

Por su parte, el analista político Jorge Alcocer Villanueva consideró que el modelo de comunicación político-electoral de acceso a radio y televisión de la reforma de 2007 ha funcionado bien en México, ya que en los aspectos operativo y técnico y en el cumplimiento de las pautas supera niveles de 90 %. “El modelo funciona, tiene problemas, sí, aunque dicho sea con verdad, quizá la crítica tenga que ver con la llamada ?espotización? y con la denuncia reiterada de uso indebido, venta en mercado negro de tiempo en radio y televisión para obtener menciones y entrevistas”, apuntó.

Pese a las denuncias reiteradas sobre la venta en el mercado negro, resaltó que no se ha documentado este asunto por quienes se quejan desde el ámbito político. El fundador de la Revista Voz y Voto lamentó además que los partidos políticos continúen moviéndose dentro de la visión mercantilizada de la comunicación política que hace de candidatos un producto y de su mensaje o spot un simple “martilleo”.

Mientras tanto, el articulista y analista político, José Buendía Hegewisch, recordó que entre los objetivos de la aprobación del actual modelo de comunicación político-electoral 2007-2008, estaban la equidad de la contienda y elevar la calidad del debate entre los candidatos. En México, precisó, no es raro que después de una elección impugnada, sobrevenga una reforma electoral que trate de responder a los motivos de impugnación de los perdedores.

Por otra parte, el hecho de que ni los particulares ni los partidos puedan contratar spots en los medios de comunicación, provoca un modelo que tiene excesos.